En un pequeño pueblo de Ohio, un grupo de seis chavales están rodando una película para un concurso amateur. En medio de la filmación son testigos del accidente de un tren del ejército, que transporta algo que se escapará y provocará el terror en la antes tranquila población.
Bien, ésta no es fácil, al lío.
Mi madre siempre me recuerda las tardes de mi niñez, en las que me llevaba al cine y nos veíamos sesiones de dos películas. Tardes que supongo serán el pilar en el que se basa mi amor, por no decir frikismo, hacia el séptimo arte. Apenas recuerdo las películas que pudimos ver, ¿decenas? ¿cientos? Yo era muy pequeño entonces. Pero si recuerdo la sensación de ir de la mano con ella, hacia esas grandes (no tanto) salas. Me compraría un refresco, me compraría palomitas y me temo que muchas veces me sacaría dormido del cine. Me quedaba embobado contemplando, las maravillosas historias que me contaban en esa gigantesca (no tanto) pantalla en blanco. Era todo lo feliz que podía ser un niño de apenas seis años.
Esa es la sensación que he tenido hoy.
¿Que tiene fallos argumentales? Sí ¿Que es previsible? También ¿Que Abrams no es Spielberg ni de cerca? Perfecto. Yo he tenido un sonrisa dibujada en la cara durante las dos horas y que todavía me dura.
A mi entender, los chavales no lo hacen nada mal, mención especial hacia Elle Falling, espectacular como esa cría pueda transmitir tanto con solo mirar. La historia principal, aunque es cierto que es algo inconexa en algunos momentos. se sostiene, Y todo lo que revolotea alrededor de ella como el enamoramiento de los chicos y la relación entre padre e hijo, son sencillamente enternecedoras.
Es como volver esas películas de nuestra niñez. ET, los goonies, con las que crecimos y a las que tanto debemos, y a mí, sinceramente, con eso me basta y me sobra. He leído muchas cosas en contra del film que hasta puedo entender, que si los actores, que si el final, que si el bicho (el bicho es una castaña, eso es cierto) pero creo que lo mas importante es como te haga sentir la historia que te están contando, y señores, la historia me ha llegado.
No se que más deciros, solo recomendárosla encarecidamente, con esto me ganare el odio de unos cuantos, por que me temo que o la amas o la odias. Pero si la veis con los ojos de ese chavalín de seis años al que su madre lleva al cine esas tardes infernales de verano, os gustará, os encantará y os emocionará.
A todo esto, he ido al cine acompañado de mi padre. Supongo que esto será lo que llaman cerrar el círculo.
