Adaptación de la novela homónima de Michael Conelly, nos presenta a Mickey Haller (Matthew McConaughey) un abogado de Hollywood del corte "jo tío, como me molo a mí mismo". Mickey acepta un caso en apariencia simple y que le reportara sustanciosas ganancias, pero que se irá complicando hasta poner en peligro su propia vida y la de los suyos.
Como veis el argumento no es que sea para tirar cohetes, supongo que se habrán hecho una veintena de películas con algo parecido a esto. Sin embargo, estamos ante una muy entretenida y fácil de ver, lo cual demuestra que no hace falta tener la imaginación de Nolan en Origen para parir un producto aceptable. Con un buen reparto, destacando a Matthew y a Ryan Phillippe como protagonistas y a William H. Macy como secundario de lujo, una narración ágil y unos personajes carismáticos puedes sacar algo que al gran público le agrade. No hace falta más, no optará a los oscar, pero no se la pegará en taquilla.
En resumen, buen film, sin muchos giros argumentales absurdos, que podéis ir a ver al cien con el/la pariente/a sin miedo, para todo lo demás el teniente Kaffe
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